Un campo de tonos azules, malvas, burdeos...se extiende hasta el horizonte creando una atmósfera de ensueño. Los árboles ayudan a crear profundidad al paisaje. Los suaves tonos del cielo entrelazados con pinceladas de azul, añaden serenidad a este paisaje imaginario que invita a perderse en sus profundidades.
Acuarela en papel Arches 300 g/m2, 100% algodón
Obra sin enmarcar